«El patrón epidemiológico actual, caracterizado por el aumento de la esperanza de vida, las mejoras en la salud pública y en la atención sanitaria, así como la adopción de determinados estilos de vida, condiciona un incremento de las personas con problemas de salud crónicos y sus consecuencias1,2. En la Unión Europea los fenómenos de envejecimiento, cronicidad y dependencia están aumentando de manera exponencial, estimándose que el porcentaje de personas mayores de 65 años, que actualmente se sitúa en torno al 20 %, aumentará hasta un 29,1 % en el año 2080.
En España, este porcentaje, que actualmente está en el 19,2 % pasará a un 25,2 % de la población total de España en el año 2033, habiendo más de 14 millones de personas mayores (34,6 %) en 2066. La diabetes mellitus (DM), como enfermedad crónica, afecta aproximadamente a 347 millones de personas en todo el mundo, estimando que en el 2030 uno de cada 10 adultos tendrá diabetes6,7. Es, además, una de las diez principales causas de muerte en los últimos 15 años, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Su inadecuado control supone el desarrollo de complicaciones y daños graves para la persona que la padece, que conducen a un deterioro tanto de la calidad como de la esperanza de vida, afectando no solo a la persona que la padece sino también a su entorno y familia. Esta situación requiere de profesionales de la Enfermería cualificados, que den respuesta a las necesidades de salud desde una atención ética, humana, autónoma y competente, bajo un prisma de seguridad para el paciente y centrada en las buenas prácticas enfermeras.
Para ello es necesaria una continuidad de cuidados que permita una adecuada coordinación entre los distintos niveles asistenciales, y que responda a las necesidades sociosanitarias de las personas con diabetes, familiares y cuidadores.
En este contexto y atendiendo a su visión y misión, el Consejo General de Enfermería de España (CGE) ha ordenado la actuación de las enfermeras/os en el ámbito de los cuidados y educación terapéutica (ET) de las personas con diabetes, familiares y/o cuidadores, mediante una resolución respaldada por la asamblea general de la organización colegial.
En esta resolución se recogen tanto los diagnósticos e intervenciones que realizan estas enfermeras/os, como las actuaciones concretas que llevan a cabo en su día a día.
Se muestra, por lo tanto, cómo las enfermeras/os son profesionales clave para la mejora de la calidad asistencial, focalizada en las políticas de seguridad del paciente, entendiendo éstas como el camino hacia una asistencia sanitaria exenta de todo daño. En esta línea de actuación se presenta ahora la publicación: Manejo del paciente con diabetes tipo 2 para enfermeras, que pretende ser un instrumento de orientación y ayuda, que aporte una visión clara sobre el adecuado manejo de la DM por parte de las enfermeras/os como profesionales integrantes de un equipo multidisciplinar.»